A Urkullu se le están abriendo cada vez más frentes. Y la escenificación de hoy de uno de estos frentes ha sido más que evidente. Pero no, no se debe a la incomprensible decisión de Urkullu de tener a los vascos controlados en sus respectivos municipios de residencia, saltándose así, a la torera, la libertades que los vascos debíamos recuperar al entrar en la Fase 1 de la desescalada.

Resulta que esta mañana, el Lehendakari, acompañado de la consejera de Salud, Nekane Murga, y el director general de Osakidetza, Juan Luis Diego, han visitado el Hospital de Cruces, el hospital bizkaitarra con mayor número de pacientes afectados por el coronavirus. Hasta ahí todo normal.

¿Se avecinan tiempos revueltos?

Lo que parecía ser una más de esas visitas ‘postureo’ de este Gobierno Vasco (para ser justos, casi todos los políticos hacen lo mismo), ha acabado en unos espectaculares abucheos por parte de algunos trabajadores del centro sanitario, al parecer absolutamente indignados con la gestión del coronavirus que ha hecho el Gobierno Vasco.

A pesar de que la situación está más tranquila en los hospitales vascos por la reducción de los nuevos casos diarios de coronavirus, algunos trabajadores del hospital de Cruces no han dudado este lunes en mostrar su malestar a Urkullu. Y lo han hecho haciendo bastante ruido, como se puede ver en los vídeos que adjuntamos en la noticia.

Tanto, que hasta periodistas del régimen ‘jeltzale’ se han tenido que hacer eco de lo ocurrido. Incluso los que trabajan en Euskal Telebista, como Xabier Lapitz, se han visto obligados a informar sobre la impresionante pitada que se ha llevado el Lehendakari. Eso sí, por ahora, el Deia sigue ‘missing’ y no ha informado al respecto. Se ve que a los gestores del diario de la parroquia no les interesa hacerlo público.

Redacción de euskalnews.com