Según ha adelantado el digital Altavoz de Sucesos (noticia reproducida en euskalnews.com), la policía francesa ha detenido a un hombre de 39 años, de origen ruandés, por la investigación abierta tras el incendio en la catedral de Nantes que se produjo este sábado.

La investigación del «incendio provocado» en la catedral de Nantes ha dejado un primer detenido, un hombre africano, que realizaba las labores de voluntario de la diócesis. Según informa el diario francés Le Figaro, se trataba de un antiguo refugiado en Ruanda que podría haber incendiado la catedral por su enfado al ver vencido el permiso para seguir residiendo en Francia.

De momento no está confirmada esa versión, ya que la fiscalía confirma que la detención se debe a su incapacidad para explicar su agenda del sábado y sovre cómo cerró la basílica el viernes por la noche.

«Nada permite involucrarlo en la comisión del incendio. Debemos seguir investigando», dice Pierre Sennès, fiscal de Nantes. «Debemos ser cautelosos. Estamos investigando sus movimientos y de momento no podemos confirmar que haya sido el autor de los hechos».

El incendio se inició este sábado por la mañana. Los bomberos tardaron unas pocas horas en controlar el incendio, logrando evitar que los elementos estructurales de la catedral se vieran afectados. Las llamas sí calcinaron por completo el gran órgano y provocó daños irreparables en algunos otros elementos, como un cuadro de del pintor del siglo XIX Hippolyte Flandrin.

Páginas yihadistas recogieron el incendio

Diversas páginas yihadistas se hicieron eco del incendio de la catedral de Nantes. En varias de ellas se puede ver el vídeo que muestra cómo las llamas calcinan el valioso edificio católico.

Para el yihadismo, ese tipo de incendios, que suponen una mala noticia para el cristianismo, es una buena noticia al ser interpretado como un castigo de Alá contra los infieles.