Vamos a ser duros, pero reales: Ya hay una nueva víctima mortal por culpa del totalitarismo de los gobertantes que imponen sus restricciones y de la mayoría de una sociedad absolutamente aborregada que aplauden como suspenden sus derechos, restrinjen sus libertades e incluso se alegran cuando los mandatarios condenan a los ciudadanos cerrándoles sus negocios, y por ende, acabando con su modo de vida.

Resulta que ha hablado la viuda de la última víctima de esta locura restrictiva y reaccionaria que los políticos y los medios tratan de disfrazar de responsabilidad en base a una supuesta necesidad sanitaria: el hostelero que se ha suicidado al ver la ruina que le esperaba con el bar cerrado por las directrices de unos políticos profesionales inútiles que dicen estar asesorados por un equipo de expertos que se ha demostrado que no existe. El testimonio de ésta viuda es desgarrador:

Su marido decidió quitarse la vida por culpa de las nefastas medidas de los diferentes gobiernos (en este caso los culpables son tanto el Gobierno Central como el de Castilla y León), que ha obligado a cerrar a cal y canto restaurantes y hoteles, impidiendo su funcionamiento normal pero obligándoles a asumir los gastos corrientes de alquiler, agua, luz, seguridad social, seguros… y por supuesto, los queridos impuestos que tanto gustan a los políticos. Sobre todo a los responsables de Hacienda.

Es evidente que este desolador vídeo no lo veréis en los medios de comunicación tradicionales ni os enteraréis que en el Congreso se le ha dedicado un minuto de silencio en su recuerdo:

¿Por qué será?

Redacción de euskalnews.com