Los mejores vídeos de las multitudinarias protestas que ponen a Australia en el foco
Los ciudadanos de las ciudades más grandes de Australia han salido a las calles en protesta por los estrictos cierres de coronavirus y la vacunación obligatoria para los trabajadores, con la policía el miércoles en Melbourne disparando balas de goma y bolas de pimienta en el tercer día de manifestaciones.
Los residentes de Melbourne han estado bajo un estricto bloqueo durante 230 días que incluye un toque de queda a las 9 pm. La policía arrestó a 215 manifestantes durante el día y dos agentes sufrieron heridas en la cabeza: “He crecido aquí toda mi vida en Australia, no puedo creer que también esté viendo esto en mi estado”, dijo el periodista australiano Rukshan Fernando en una entrevista con Laura Ingraham de Fox News.
Ingraham afirmó que por un momento pensó que estaba viendo escenas de China. En sólo unos meses, dijo, Australia “ha pasado de ser uno de los países más libres del mundo a lo que es esencialmente un estado policial biomédico”: “China mira muy rapazmente a Australia, pero se parece más a algo en la Plaza de Tiananmen de lo que cabría esperar de Australia”, dijo Ingraham en su programa el martes por la noche.
Los mejores vídeos de las multitudinarias protestas
Muchos australianos han publicado videos en las redes sociales para documentar la estricta aplicación de las políticas COVID del país. Uno muestra a un oficial de policía en una estación de transporte en Melbourne corriendo detrás de un hombre y tirándolo violentamente al suelo.
En Nueva Gales del Sur, se ve a una madre, con un niño pequeño, que aparentemente estaba organizando una protesta pacífica en una acera, siendo arrastrada por la policía mientras su hijo llora.
La policía de Melbourne el miércoles se ve en los dos videos a continuación disparando balas de goma a los manifestantes. El segundo muestra a la policía disparando a la espalda de personas que huyen:
En este video, la policía advierte el lunes a los manifestantes que se dispersen “o se usará la fuerza”. Los manifestantes, encabezados por un cartel de “libertad”, corean en desafío “¡Todos los días, todos los días, todos los días!”.
Los manifestantes en Melbourne el miércoles coreaban “para que no lo olvidemos” mientras se paraban frente a un monumento a la Segunda Guerra Mundial.
Sky News Australia informó el miércoles que la policía de Victoria ha solicitado poner una “orden de no volar” a los helicópteros y drones de los medios de comunicación para evitar que filmen futuras manifestaciones.
El martes, unos 2.000 comerciantes y activistas contra la vacunación y a favor de la libertad se manifestaron contra el cierre de dos semanas de la industria de la construcción impuesto debido al aumento de casos de COVID.
Un manifestante grabó en video su intercambio con un oficial de policía que dijo que simpatizaba con las protestas pero que simplemente estaba haciendo su trabajo.
Los manifestantes de Melbourne el sábado coreaban a los agentes de policía “¡Qué vergüenza!”:
La policía usa gas pimienta para someter a los manifestantes en Melbourne el sábado:
Un comerciante se quitó la vida en un sitio de construcción en Melbourne horas después de que el gobierno anunciara el cierre de los sitios de construcción como castigo por la vacilación de los trabajadores por las vacunas.
En noviembre pasado, Australia se jactó de que su política de “cero COVID” basada en la “fe en la ciencia” había “casi eliminado” el COVID-19. Pero desde ahí, los casos han aumentado más de un 19.000%.
La semana pasada, Reuters informó que Nueva Gales del Sur y Victoria, que comprenden más de la mitad de los 25 millones de habitantes de Australia, están probando un software de reconocimiento facial que permite a la policía verificar si las personas están en casa durante la cuarentena de COVID-19.
Fuente: Trikooba y WNDNewsCenter
Imbéciles. Cuando esos tarados se den cuenta de lo que tienen preparados para ellos las élites neomalthusianas y quieran rectificar, será demasiado tarde.
Su miopía mental no les da para ver más allá de su nómina y de la que creen una situación privilegiada en virtud de su estatus como funcionarios; lo cierto es que millones de policías en todo el mundo pasarán a formar parte de la escoria de los prescindibles y supernumerarios en la que nos encontramos el resto (es decir: mera biomateria prima monetizable mientras espera su turno acelerado rumbo al crematorio) cuando les toque el turno de ir siendo sustituidos por drones y androides: mucho más eficientes, sencillos de mantener, seguros, y en definitiva, rentables.
En ese momento se verán arrojados súbitamente al otro lado de la trinchera… a ése contra el que se han ganado la vida arrojando balas de goma, botes lacrimógenos y palos.