Ya empiezan a asomar la patita. No vacunarse contra el virus chino o negarse a hacerse las pruebas de detección te podría salir muy caro, ya que se están planteando multas de hasta 3.000 euros para aquellas personas que se nieguen a aceptar semejante atropello a los derechos fundamentales.

Resulta que la Xunta de Galicia ha presentado una propuesta para multar a todo el mundo que, una vez salga la supuesta vacuna del virus chino, se niegue a ponérsela. Además, también quiere sancionar a quien no se haga la prueba PCR cuando sea necesario. Otra tropelía.

Dentro de esta propuesta, se destacan dos niveles de sanción: el leve, que supone una sanción de entre 100 y 300 euros y el grave, que sería de 3.000 hasta 60.000 euros. Vamos, que te condenan para toda la vida. Las infracciones leves serían incumplir el toque de queda, no cerrar los locales a las horas estipuladas, negarse a llevar la mascarilla aunque te encuentres a veinte kilómetros de otra persona.

Asimismo, las personas que se nieguen a hacerse las pruebas para detectar el virus chino cuando sea necesario (cuando ellos consideren, no cuando haya una justificación en base a criterios sanitarios establecidos por un equipo de expertos en la materia) o que no se pongan la vacuna anticovid cuando esté disponible, tendrán que pagar un ‘multón’ de 3.000 ‘eurazos’.

“La negativa injustificada al sometimiento a medidas de prevención, consistentes en la vacunación o la inmunización prescritas por las autoridades sanitarias serán consideradas sanción”, según se explica en la propuesta presentada.

Los mayores ‘multonazos’ serían ser positivo en coronavirus y saltarse el confinamiento, negarse a identificarse, organizar fiestas y no hacer caso a las autoridades que, en estos casos, las personas multadas tendrían que pagar entre 3.000 y 60.000 euros. En otras palabras, que te hunden en un pozo.

¿Quién será el siguiente en proponerlo? ¿Urkullu?

Redacción de euskalnews.com