Resulta que en Vitoria-Gasteiz, al igual que en la mayoría de las ciudades y pueblos de Euskadi, por segundo año consecutivo, las procesiones típicas de la Semana Santa no se han vuelto a celebrar.

La verdad es que no sabemos si ha sido prohibidas por el equipo de gobierno municipal, la Subdelegación de Gobierno, un decreto del Gobierno Vasco o de la propia Ertzaintza. Pero el hecho es que no había procesiones y el alcalde, Gorka Urtaran, más que contento. Y es que es uno de los políticos más covidianos y más pro-cierres de los que tenemos en Euskadi. Cómo no, jeltzale.

Pues resulta que el tiro les ha salido por la culata, ya que esta mañana unos (por sus reclamaciones, entendemos que anti-capitalistas) ciudadanos han decidido protestar contra Urtaran haciendo una ridícula performance en la que simulaban una procesión.

En otras palabras, que Urtaran no quería procesiones cristianas y se ha acabado comiendo un desfase a modo de procesión anti-capitalista. Ahí va el vídeo:

Desconocemos si lo han permitido porque se esperaban menos gente o porque a diferencia de con la comunidad cristiana a la que no dudan en limitar sus derechos y libertades, con los anti-capitalistas no se atreven. Pero bueno, nosotros nos alegramos de una cosa: Urtaran se ha comido una procesión que no quería y no esperaba.

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Redacción de euskalnews.com