Agentes de la Ertzaintza han detenido durante la madrugada del domingo en Barakaldo a un varón de 22 años de edad (el poco transparente Servicio de Prensa de la Ertzaintza oculta más datos relevantes) acusado de un delito de robo con violencia. Presuntamente, el sospechoso ha agredido a un varón para robarle el teléfono móvil, pero poco después ha sido sorprendido por patrullas de la Ertzaintza.

Pasadas las doce y media de la madrugada del domingo, la Ertzaintza recibía el aviso de que se estaba produciendo una pelea en la calle Fueros de Barakaldo, junto a la entrada al Metro. 

Al instante, varias patrullas de la Ertzaintza se dirigían al lugar. A su llegada, los agentes podían ver cómo un individuo con el torso desnudo se encontraba sentado en las escaleras del Metro. El individuo mostraba diversas erosiones en los nudillos de sus manos y en una ceja. Junto a él, en el suelo, había un teléfono móvil que el individuo aseguraba que no era de su propiedad. 

Mientras una de las patrullas se quedaba con el individuo en este lugar, otros ertzainas bajaban al andén del Metro, donde localizaban a dos varones, uno de los cuales presentaba diversas hinchazones en su cabeza, quien relataba a los agentes que dos individuos, con los que habían tenido una discusión hacía un rato, les habían seguido hasta el Metro y, allí, uno de ellos le había agredido, le había roto la chamarra que llevaba puesta y le había robado el teléfono móvil. Al mostrarle el teléfono que el sospechoso tenía junto a él en el momento en que lo han encontrado, la presunta víctima lo reconocía como propio, siéndole devuelto.

Así, después de hablar con el presunto agresor, y tras realizar las oportunas comprobaciones, los ertzainas procedían a la detención del supuesto agresor y ladrón bajo la acusación de un delito de robo con violencia, siendo a continuación trasladado a dependencias policiales.