Ayer los medios de comunicación mundiales se regocijaron de alegría por la noticia difundida por el The New York Times, reproducida por periódicos como el ABC y El Economista. Rusia estaba en suspensión de pagos al no haber pagado su deuda exterior dentro del plazo. Es el primer impago de la deuda externa desde 1918, o sea, desde la Revolución socialista.
Sin embargo, se trata de otro bulo, tal y como adelantan nuestros compañeros de mpr21. Para cualquier país una cantidad de 100 millones de dólares es insignificante, tanto como declarar en bancarrota al Banco de Santander porque debe 20 céntimos.
Un país se declara en suspensión de pagos cuando lo piden sus acreedores, no cuando lo dice un periódico, ni las agencias de calificación, a las cuales las sanciones impiden informar sobre Rusia.
Quien declara la suspensión es el Comité de Determinación de Derivados Crediticios, un grupo de especuladores que decide sobre el pago de valores relacionados con el impago. Los acreedores no han pedido un acuerdo sobre el supuesto impago de Rusia, hasta la fecha.
¿Por qué? Porque Rusia pagó los intereses el 24 de junio. El National Settlement Depository (NSD), encargado abonar la deuda soberana de Rusia recibió 8.500 millones de rublos, equivalentes a 159,4 millones de dólares, para el pago de los intereses.
El 23 de junio el Ministerio ruso de Economía dijo que había cumplido con sus obligaciones de servicio de bonos soberanos en su totalidad.
El día anterior Putin había firmado el decreto sobre la nueva forma de pago de las deudas en rublos, después de que los países occidentales se negaran a recibir el dinero en euros.
“El hecho de que Euroclear retuviera este dinero, no lo transfiriera a los destinatarios, no es nuestro problema”, dijo Peskov, el portavoz del Kremlin, a lo que el New York Times apostilla: “No hay razón para llamar a esta situación un incumplimiento”.
Los acreedores pueden obtener fácilmente su dinero en la moneda que deseen. Tendrán que abrir dos cuentas en Gazprombank en Zúrich, una en rublos y otra en euros. A continuación, pueden solicitar al Depósito Nacional de Liquidación de Rusia que envíe sus rublos a su cuenta en rublos en Gazprombank, que estará encantado de comprar esos rublos y transferir el valor correspondiente en euros a la cuenta en euros del inversor.
Se trata simplemente del proceso inverso al que utilizan los compradores europeos para pagar el gas ruso en rublos.
De hecho, la deuda exterior de Rusia con respecto al PIB es del 20 por cien. EE.UU del 140 por 140 por cien, y la de España de 120.