Escrito por Fernando López-Mirones, biólogo y divulgador científico

UN BUEN DÍA PARA DECIR NO

Buenos días aulladores:
¿Os dais cuenta de que hemos normalizado el pedir “fuentes” siempre a los mismos mientras a lo que se dice en las radios y TV no les exigimos absolutamente nada? Basta con que citen la frase mágica “lo dicen los expertos” y ya está, validamos la información de los que precisamente sabemos a ciencia cierta que suelen mentir. En cambio a gente que se ha ganado una buena reputación en las redes y que se documenta con rigor los ponemos en duda incluso antes de leerlos. Que esto lo hagan los creyentes es comprensible, pero se está extendiendo también entre los NEGAS (ya uso este nombre para economizar espacio como sinónimo de “persona que no traga con todo y que investiga por su cuenta con mente abierta y rigurosa”).

Esto por otra parte ha tenido un efecto maravilloso, los respiracionistas se están convirtiendo en expertos de verdad tras meses de hacer un master en efectos adversos y ciencia censurada, que es la buena en estos tiempos. No se puede hacer una cita científica cada vez que se habla, muchos divulgadores científicos somos fuentes primarias y a menudo tenemos conocimientos del años que no podemos encontrar en un paper concreto.

Por otro lado es un poco ofensivo que algunas personas siempre te pidan fuentes cada vez que dices algo; mire usted, créame o no, a su elección, pero no tengo por qué justificar mi opinión o datos con el artículo de un periódico escrito por un periodista de 26 años que sigue órdenes y no sabe nada del tema, no me da credibilidad dar eso como fuente. De hecho, modestia aparte, en este último año se han documentado conmigo más fuentes oficiales que yo con ellas. Yo daba todas las fuentes y perspectivas hace un tiempo, hasta que me di cuenta de que veía en programas de televisión, radio y en libros cosas de mi cosecha escritas por otros que no se molestan en citarme, y eso molesta además de ser deshonesto. La mayoría de las fuentes son propias, de gente conocida e informadores que ya sois, en mi caso, cientos, de chats privados de biólogos y médicos donde hablamos entre nosotros, no tenemos que dar explicaciones de todo.

Con cada afirmación o dato algunos nos jugamos la reputación, son ya muchos años. A veces hay errores por falta de datos o hipótesis obsoletas, pero esa es la forma de avanzar que tiene la ciencia. A un científico de verdad no le importa evolucionar en sus hipótesis y cambiarlas porque no es opinión ni política ni religión, es una disciplina dinámica. El problema ahora es que la Ciencia ha sido comprada por los globalicistas y solo se publica lo que los biólogos-sacerdote de su nueva religión profesan. Ahora mismo para un biólogo dar datos o hipótesis que pongan en duda el CCA (Cambio Climático Acojonante) es un suicidio profesional y esto impide a la gente ser libres porque no reciben la información contrastada sino solamente la versión globalista de todo.

No es nada nuevo, desde los años 60 del siglo pasado están preparando este ataque. De nosotros, la Humanidad, depende que estos tiranos sean detenidos y juzgados. Los que colaboran por egoísmo son cómplices necesarios de arruinar el futuro de sus hijos y nietos. Hoy es un buen día para empezar a decir NO. Un aullido