Una mujer de 68 años del estado de Illinois, EE. UU., diagnosticada con COVID-19, comenzó a recibir tratamiento con ivermectina después de que su hija demandara al hospital en el que se encontraba internada desde hacía un mes con respirador, para que se lo administren, según informó el medio Chicago Tribune.

Nurije Fype, quien ha sido paciente en el Hospital de Elmhurst de Illinois, desde el 7 de abril, y que pusieron bajo respirador artificial el 28 de abril, ahora está en coma. Acorde a lo trascendido, Desareta, hija de Fype, a quien se le concedió la tutela temporal de su madre, leyó una noticia sobre una mujer del norte del estado de Nueva York que se recuperó del virus chino después de recibir ivermectina, y acudió a los tribunales para asegurar que su mamá recibiera el tratamiento. 

Según adelanta Vanesa Cantazaro en BLes, el Chicago Tribune informó además que el abogado del Hospital Elmhurst dijo en una audiencia judicial el martes 1 de junio, que un médico externo, recibió credenciales para trabajar en el hospital para poder administrar la ivermectina a Nurije Fype, luego de que autoridades del nosocomio dijeran que no pudieron encontrar un médico afiliado al hospital para administrar la ivermectina.

Según el Daily Herald, el juez dijo en la audiencia del martes: “Ahora esperemos que el buen Dios permita que la medicación funcione”. También informó que los abogados de la señora Fype citaron argumentos de “Alianza de Cuidados Críticos de Primera Línea Covid” que afirman que la ivermectina tiene beneficios antivirales y antiinflamatorios que ayudan a las personas infectadas con el coronavirus de Wuhan. La propia Desareta respondió en un Tweet a una persona que le consultó cómo se encontraba su madre luego de recibir el tratamiento con la ivermectina, diciendo que su madre está ¡Dirigiéndose lentamente en una buena dirección! 

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), niegan la aprobación para usarlo como tratamiento contra el virus chino, alegando que no hay suficientes datos para recomendarlo, a pesar de que el popular antiparasitario viene mostrando gran efectividad en pacientes Covid-19 positivos en varios lugares. En este sentido, algunos de los países que fueron noticia en estos días por los resultados esperanzadores que están teniendo con la aplicación de la ivermectina, son India, México y Ecuador.

Según informó BLes días atrás, en Delhi, donde el 20 de abril se comenzó a administrar el antiparasitario, siguiendo las directrices del Instituto de Ciencias Médicas de la India (AIIMS), los casos cayeron de 28.395 a solo 2.260 el 22 de mayo. Representando una asombrosa caída del 92%. Asimismo, los casos en Uttar Pradesh han caído de 37.944 el 24 de abril a 5.964 el 22 de mayo, lo que corresponde a una disminución del 84%.

Otro caso que resonó en estos fue anunciado por el Gobierno de la Ciudad de México, el 14 de mayo, cuando informó los óptimos resultados que obtuvieron luego de un estudio en el que se analizó el uso de ivermectina en personas infectadas con el virus de Wuhan. El mismo reflejó una reducción de entre 52 y 76% en la probabilidad de necesitar hospitalización.

Pero a pesar de que en EE. UU. y en la mayoría de los países, las agencias gubernamentales y médicos siguen escépticos con respecto al uso de este económico y asequible fármaco, y se mantienen solo escuchando las recomendaciones de la FDA, e incluso de la OMS que solo promueven la distribución de la vacuna experimental, un grupo de médicos y científico de alto perfil se ha pronunciado a favor de ella. Uno de ellos es el destacado científico médico, Dr. Pierre Kory, de la Alianza de Cuidados Críticos Front Line COVID-19, quien denunció que la supresión del uso de la ivermectina por parte de la OMS contra el coronavirus de Wuhan, habría causado la pérdida de cerca de “medio millón de vidas”.

Para Kory el equipo de científicos que combate el uso de la ivermectina, al servicio de la OMS, cometió muchas irregularidades al considerar los informes de investigaciones, omitiendo y ocultando datos para torcerlos de acuerdo con sus aspiraciones económicas.

La ivermectina fue descubierta en la década de 1960 por Satoshi Omura, un microbiólogo del Instituto Kitasato de Tokio, y por el biólogo y parasitólogo estadounidense William Campbell. Luego de varias investigaciones para optimizar su actividad biológica y su seguridad, dicho medicamento demostró ser un potente y efectivo antiparasitario contra una amplia gama de parásitos. 

Tiempo después, investigadores australianos encontraron que la ivermectina ejerce además potentes efectos antivirales contra dos virus que causan enfermedades humanas potencialmente mortales, el virus de inmunodeficiencia humana-1 (VIH-1) y el virus del dengue (DENV). Además se vio que limita la infección por patógenos virales, como el virus de la encefalitis equina venezolana y el virus de la influenza.

Tal parece que la ivermectina comparte similitudes con la hidroxicloroquina, no solo en el sentido de que ambos medicamentos son de muy bajo costo, están ampliamente disponibles y se han utilizado para tratar otras enfermedades antes del virus chino, demostrando ser seguros y efectivos, sino también en el hecho de que representan un factor contrario a los intereses económicos de la gran industria farmacéutica.