Pfizer violó el protocolo y adulteró las pruebas para obtener la aprobación de la FDA
Las pruebas de las vacunas Moderna y Pfizer se realizaron, como es habitual, con un grupo de control, es decir, con un grupo dentro del ensayo que recibió un placebo y no la vacuna de prueba. Sin embargo, durante el ensayo, las farmacéuticas decidieron romper el protocolo y notificar al grupo de control que no estaban vacunados, por lo que a casi todo el grupo de control se le administró la vacuna, tal y cómo adelantan nuestros compañeros de mpr21.
Según ha informado la NPR, la radio pública de los Estados Unidos, la disolución intencional del grupo placebo viola el propósito científico de probar si la vacuna tiene alguna eficacia; cualquier beneficio real y/o problemas de seguridad no podrá ser evidenciado, ya que sin un grupo de control, no hay nada con lo que comparar al grupo vacunado.
Para que quede clara la gravedad de la decisión adoptada y la metodología empleada, la autorización y aprobación final de la agencia norteamericana del medicamento (FDA) para las vacunas se basa en el resultado de estos ensayos, por lo que no hay forma de medir la eficacia, efectividad o seguridad de la vacuna en sí.
No queda nadie dentro del grupo de control, de un valor estadísticamente válido, para proporcionar una comparación adecuada de los resultados para personas vacunadas frente a las no vacunadas. Esto es una locura.
De acuerdo al artículo de NPR, ¿cómo puede considerarse eficaz la vacuna cuando no hay un grupo de personas no vacunadas con las que comparar los resultados?. Da igual, porque la FDA, al igual que la OMS, es otro de los organismos más corrompidos del sistema sanitario mundial.
Es preocupante que la salud de casi 8.0000 millones de personas de este planeta, esté en manos de uno de los Organismo más corruptos y de unas industrias farmacéuticas cuyo live motiv es sobornar a los profesionales de la medicina y arruinar a las Administraciones que lo consienten, con tal de colocar más
fármacos y ganar más dinero.
Lo peor es que estás prácticas corruptoras se han generalizado tanto, que la Fiscalía que tendría que actuar ante este comportamiento ilícito según recoge la ley 29/ 2006 del 26 de Julio, mira para otro lado y se desentiende por completo.
Existe tal podredumbre en el inframundo sanitario, que no me extraña que todos estemos medio enfermos con las recetas forzadas que nos dan los médicos con tal de pillar una comisión.
En mi opinion, solo hay un motivo para las actuales prisas vacunatorias, y naturalmente no tienen que ver con la salud. Tienen que ver con esta misma noticia, es decir, si todos estan vacunados, no se podrá comparar con nada la presunta eficacia de las “vacunas”, pudiendo vender cualquier moto a partir de ese momento.
Vamos, que si caen los vacunados enfermos y los supuestamente no vacunados pero que si lo están, enfermos también, entonces es que no hay efectos adversos distinguibles de la condición “normal”. La madre que los parió.
El grupo de control SOMOS NOSOTROS.