El jueves 18 de noviembre, un juez declaró inocentes a dos hombres condenados por el asesinato del activista de los derechos humanos Malcolm X, tras décadas de cuestionar quién había sido el responsable. Una nueva investigación descubrió indicios de que las autoridades habían ocultado algunas pruebas, lo que condujo a una condena errónea de dos hombres, Muhammad Aziz y el difunto Khalil Islam. Como resultado, la jueza Ellen Biben rechazó las sentencias de Muhammad Aziz y del difunto Khalil Islam, según informó la agencia de noticias AP de la que se hacen eco nuestros compañeros de BLes.

El asesinato de Malcolm X

Malcolm X, que animó a los negros a alzar la voz por los derechos civiles “por cualquier medio necesario”, había logrado el reconocimiento nacional, encarnando la voz de la Nación del Islam. Malcolm X pareció manifestar su intención de unidad racial tras un viaje a La Meca, lo que le llevó a separarse de las organizaciones musulmanas negras en sus últimos días. Algunos miembros de la Nación del Islam le consideraron un traidor, lo que creó olas de rabia. A la edad de 39 años, fue asesinado a tiros mientras daba un discurso el 21 de febrero de 1965.

Condenados los sospechosos del asesinato de Malcolm X

En marzo de 1966, Aziz e Islam, conocidos como Norman 3X Butler y Thomas 15X Johnson, junto con una tercera persona, fueron declarados culpables del asesinato y condenados a cadena perpetua. Mujahid Abdul Halim, el tercer hombre, también conocido como Talmadge Hayer y Thomas Hagan, confesó haber matado a Malcolm X pero dijo que ni Aziz ni Islam estaban implicados. No se encontraron pruebas sólidas de su conexión con el asesinato, y los dos tenían coartadas.
En 2010, Halim fue puesto en libertad.

Aziz habló en el tribunal: “El suceso que nos ha traído hoy al tribunal nunca debería haber ocurrido”. Y añadió: “Soy un hombre de 83 años que ha sido víctima del sistema de justicia penal”, según informó AP news

Nuevas actualizaciones del asesinato de Malcolm X

El jueves 18 de noviembre, Halim se refirió a otros hombres como cómplices, pero se negó a hacer ningún comentario, según un familiar. Sin embargo, no se ha determinado que nadie sea responsable del asesinato. Según el fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus Vance Jr., la investigación actualizada ha revelado los detalles de los archivos del FBI sobre los testigos que no incriminaron al Islam, pero dieron a entender que otros sospechosos estaban implicados.

Los archivos descubrieron que los testigos fueron obligados a ocultar su papel de informantes en sus conversaciones con la policía y los fiscales, siguiendo las instrucciones del difunto director del FBI J. Edgar Hoover. Vance añadió: “Hay una conclusión final: El Sr. Aziz y el Sr. Islam fueron condenados injustamente por este delito”, y volver a juzgar el caso de 56 años no es una posibilidad. También pidió disculpas por las “graves e inaceptables violaciones de la ley y de la confianza pública” de las fuerzas del orden.

Barry Scheck, cofundador del Proyecto Inocencia, uno de los abogados de la familia de Aziz e Islam, informó de que el resultado de la revisión había descubierto pruebas ocultadas a los fiscales por el FBI y la policía. El abogado consideró que se trataba de un complot para perturbar el crecimiento de los derechos civiles de los negros.

Deborah Francois, otra abogada que trabaja con el abogado de derechos civiles David Shanies, dijo que las pruebas de la inocencia de Aziz e Islam, descubiertas por el FBI y el Departamento de Policía de Nueva York en pocas horas, fueron ignoradas y suprimidas. Biden se refirió al caso diciendo que “clama por una justicia fundamental”. El miércoles 17 de noviembre, la policía de Nueva York y el FBI declararon que habían colaborado estrechamente en la nueva investigación.

El caso sigue abierto

El jueves, la Jefa de Patrulla del Departamento de Policía de Nueva York, Juanita Holmes, también expresó sus condolencias a la familia de Malcolm X, a Aziz y al Islam. En respuesta a las exoneraciones ampliamente difundidas, incluso el alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, declaró públicamente que el público merecía más información relacionada.

El alcalde dijo que tenían que averiguar quién había cometido el crimen y quién estaba detrás de él en nombre de millones y millones de estadounidenses. Y añadió: “Espero que esto no ponga fin a la discusión”. Todas las pruebas físicas, incluida la escopeta utilizada en el asesinato, han desaparecido, al igual que los registros de llamadas que pudieran existir. Todos los testigos oculares que declararon en el juicio han fallecido.