“Sólo 15 minutos a solas pueden hacer maravillas por su estado de ánimo y su mente” por Jocelyn Solis (Moreira vía Activist Post)

Pasar tiempo a solas puede provocar miedo a mucha gente, lo cual es comprensible. Al mismo tiempo, a menudo se malinterpreta la diferencia entre – momentos de soledad- y -sentimiento de soledad-.

Como psicóloga, estudio la soledad: el tiempo que pasamos solos, sin interactuar con otras personas. Empecé esta investigación hace más de diez años y, hasta entonces, los resultados sobre el tiempo que los jóvenes pasan solos habían sugerido que a menudo experimentan estados de ánimo bajos cuando están solos.

En las redes sociales, la televisión o la música que escuchamos, solemos imaginar la felicidad como excitación, entusiasmo y dinamismo.

Desde esa perspectiva, la soledad se confunde a menudo con el sentimiento de soledad.

En psicología, los investigadores definen la soledad como un sentimiento de angustia que experimentamos cuando no tenemos, o somos incapaces de conseguir, el tipo de conexiones o relaciones sociales que esperamos. La soledad (estar en soledad) es diferente.

Aunque las definiciones de soledad pueden variar, lo interesante es que para muchos ser solitario no significa necesariamente que no haya nadie más alrededor. En cambio, muchas personas pueden encontrar, y de hecho encuentran, estar a solas en los espacios públicos, ya sea sentadas con una taza de té en una cafetería concurrida o leyendo un libro en un parque. Y mis investigaciones sugieren que tomarse un tiempo para uno mismo podría tener un impacto positivo en el estado de ánimo diario.

Muchos de nosotros hemos tenido días en los que hay problemas en el trabajo, en los que las cosas no salen como esperábamos o en los que asumimos demasiadas cosas y nos sentimos abrumados. Lo que he descubierto es que aprender a tomarte un poco de tiempo para ti, un momento de soledad, podría ayudarte a lidiar con estos sentimientos.

¿Qué podemos ganar con estar a solas?

En una serie de experimentos, llevé a estudiantes universitarios a una habitación para que se sentaran en silencio consigo mismos. En algunos estudios, les quité las mochilas y los dispositivos y les pedí que se sentaran con sus pensamientos; en otras ocasiones, los estudiantes permanecieron en la habitación con libros o sus teléfonos.

Tras sólo 15 minutos de estar a solas, comprobé que las emociones fuertes que pudieran haber sentido los participantes, como ansiedad o excitación, disminuyeron. Llegué a la conclusión de que estar a solas tiene la capacidad de reducir los niveles de excitación de las personas, lo que significa que puede ser útil en situaciones en las que nos sentimos frustrados, agitados o enfadados.

Mucha gente podría suponer que sólo los introvertidos disfrutan de la soledad. Pero si bien es cierto que los introvertidos prefieren estar solos, no son las únicas personas que pueden beneficiarse de estar a solas.

En una encuesta realizada a más de 18.000 adultos de todo el mundo, más de la mitad votaron por la soledad como una de las actividades clave que realizan para descansar.

Así que, si eres una persona extrovertida, no dejes que esto te impida tomarte un tiempo a solas para calmarte.

Sentarse con tus pensamientos puede ser difícil

Lo difícil de pasar tiempo a solas es que a veces puede resultar aburrido y solitario.

A muchas personas les resulta difícil sentarse a pensar y prefieren tener algo que hacer. De hecho, obligarse a sentarse y no hacer nada puede hacer que el tiempo a solas te resulte menos agradable. Así que tal vez prefieras realizar algún tipo de actividad durante tu momento a solas.

En mi estudio, di a los participantes la opción de no hacer nada o dedicar su tiempo a clasificar cientos y cientos de lápices de golf en cajas. Después de pedirles que estuvieran solos durante diez minutos, la mayoría de los participantes eligió clasificar los lápices.

Este es el tipo de actividad que pensé que la mayoría de la gente encontraría aburrida. Sin embargo, la elección de hacer la tarea aburrida surge del deseo de mantenernos ocupados cuando no hay otras personas cerca que ocupen nuestro espacio mental.

Así que, si te encuentras desplazando la pantalla de tu dispositivo cada vez que tienes unos momentos de soledad, esto es bastante común. No seas duro contigo mismo. Mucha gente lo hace para combatir el estrés y el aburrimiento.

Algunas personas también prefieren pasar el tiempo solas haciendo las tareas cotidianas, como ir a la tienda de comestibles o hacer lavandería.

Participar solo en actividades divertidas

Sin embargo, es curioso que muchas personas eviten realizar actividades divertidas solas, como ir al cine o cenar en un restaurante. Esto puede deberse a que tendemos a pensar que son actividades que hacemos con amigos y personas cercanas, por lo que hacerlas a solas puede hacernos sentir juzgados y cohibidos.

Viajar solo es otra actividad que puede resultar intimidante, sobre todo para las mujeres.

Pero una de las principales ventajas de ir en solitario es la oportunidad de encontrar la calma y tener la libertad de elegir qué hacer y cómo hacerlo.

En mi tiempo estudiando la soledad, me he retado a mí misma a emprender algunas de estas actividades divertidas en mis momentos de soledad, y he encontrado la experiencia bastante liberadora. Otras mujeres tienen experiencias similares, sobre todo cuando viajan, lo que les ha hecho sentirse empoderadas y liberadas.

Para superar nuestro miedo a la soledad, tenemos que reconocer sus beneficios y verla como una opción positiva, no como algo que nos sucede.

Aunque hacer un viaje en solitario puede ser demasiado para ti en este momento, sacar tiempo de tu apretada agenda para pequeñas dosis de soledad puede ser justo lo que necesitas.

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