Los aparatos de propaganda del Departamento de Estado
La cadena de televisión CNN es uno de los aparatos de relaciones públicas del Departamento de Estado de Estados Unidos. A su vez, el Departamento de Estado dirige la mayor parte de las operaciones mundiales de la CIA. La CNN, la CIA y el Departamento de Estado forman un trío. A través de la CNN, el Departamento de Estado intoxica a las agencias de noticias y medios de comunicación del mundo entero, según informa mpr21.
Basándose en la CIA, o sea, en “funcionarios anónimos de la inteligencia estadounidense”, la CNN y otros medios aseguran que el FSB ruso manipula pequeñas cuentas en las redes sociales y que en el Kremlin hay un plan de desinformación sistemático.
El FSB ruso utiliza tanto recursos propios y “activistas en línea”, según la terminología del Guardian, como a lo que en la Guerra Fría llamaban “tontos útiles”, es decir, medios independientes que, a causa de su alineamiento antimperialista, no se dan cuenta de que están siendo manipulados.
Las operaciones rusas de influencia están diseñadas deliberadamente para propagarse a pequeña escala, aseguran las fuentes de la CNN.
Cualquier medio que no asuma la versión oficial, convertida en mayoritaria, es sospechoso de servir a los intereses del Kremlin.
El mensaje tiene que ser único y uniforme. Por eso el New York Times repite la monserga de la CNN: “Las agencias de espionaje rusas están utilizando técnicas de lavado de influencias para ocultar la participación del Kremlin en los mensajes a favor de Rusia y contra Ucrania”.
Nos espera una campaña de alto calado contra los “prorrusos”, a la que se sumarán los buscadores y las redes sociales, e incluso los sicólogos, porque es imposible que Rusia tenga razón. Sus seguidores los obtiene gracias a una propaganda mentirosa.