El temor a una recesión en la economía estadounidense ha hundido los mercados financieros y también está empujando a algunos monopolios tecnológicos a recortar sus plantillas, según adelanta mpr21. El 1 de agosto Intel anunció que planea eliminar 16.000 puestos de trabajo antes de fin de año, lo que supone más del 15 por cien de sus 110.000 trabajadores.
El recorte se produce cuando el monopolio registró una pérdida de 1.600 millones de dólares en el segundo trimestre y una caída del 1 por cien en su facturación hasta 12.800 millones de dólares. El gigante de los semiconductores también pretende reducir sus gastos de capital en un 20 por cien este año y detener la distribución de dividendos en el cuarto trimestre. Con estas medidas quiere reducir costes por 10.000 millones de dólares en 2025.
Unos días después le tocó a Dell anunciar una reestructuración de su plantilla. La empresa no precisó el número de puestos a eliminar, pero afectará a 12.500 trabajadores, lo que supone el 10 por cien de su fuerza de trabajo.
Durante este curso Dell ya ha recortado 13.000 puestos de trabajo, reduciendo su plantilla a 120.000 trabajadores. Sus ingresos ascendieron a 88.400 millones de dólares, un 14 por cien menos que en el ejercicio del año pasado.
Con esta reorganización, que se centra en sus divisiones de ventas y publicidad, Dell quiere convertirse en una empresa más “ágil”. Quiere centralizar sus equipos de ventas en un solo departamento, crear una nueva sección encargada de comercializar la inteligencia artificial, así como una organización internacional encargada de las prqueñas empresas.
Dell también está creando una nueva función de administrador del ecosistema de socios para cada región importante fuera de Estados Unidos.
Por su parte, Cisco, una empresa especializada en equipos de redes digitales, eliminará miles de puestos de trabajo, seis meses después de despedir a 4.000 personas. Ante la caída de la demanda de algunos de sus productos de red, el monopolio estadounidense se centra en otras actividades como la ciberseguridad y la inteligencia artificial.
En lo que a la inteligencia arificial respecta, las empresas tiene numerosos problemas económicos. OpenAI, la empresa creadora de ChatGPT, está al borde de la quiebra. Este año sus pérdidas pueden alcanzar los 5.000 millones de dólares, como consecuencia de los exorbitantes costos asociados al mantenimiento y desarrollo de sus modelos de inteligencia artificial.
Se trata de una de las empresas de más rápido crecimiento, pero también la más intensiva en capital en la historia de Silicon Valley.