El biólogo Jon Ander Etxebarria afirma que “las olas” las “crean” los políticos “a discreción en base al número de test realizados”
Escrito por Jon Ander Etxebarria, experto biólogo, Jefe del Control de Calidad de Aguas de Bilbao y ex-Decano del Colegio de Biólogos de Euskadi
El Gobierno Vasco vuelve a utilizar nuevamente los test para crear una nueva ola. El promedio de test realizados desde el 1 de junio hasta el 4 de julio ha sido de 6650 test mientras que desde ese día hasta la fecha actual se han realizado 8699, es decir un 30,83%, y, principalmente, en las franjas de edad menores de 39 años con el fin de penalizar el ocio de los jóvenes y de paso de presionar para que se vacunen, por cierto franjas donde si se analizan los datos el rango 17 a 25 años ( propio del botellón) presenta menos positivos que la franja de edad de 26 a 39 años, siendo en este momento la década de 30 a 39 años la que está creciendo en vacunación.
Desde un inicio he ido comentando que el estadístico de la IA no servía y que las olas se pueden crear a discreción en base al número de test realizados. Igualmente, desde un inicio comenté que el problema era más de planificación sanitaria que de salud pública y, curiosamente, tanto el Reino Unido como Alemania a partir de ahora se van a ir olvidando de la IA y van a dar prioridad a los datos de hospitalización y ucis, es decir, volver a la sanidad de siempre y no a este despropósito inventándose un estadístico manipulable a criterio de la administración.
En base a este estadístico no válido se han tomado todas las medidas de restricción que hemos tenido, por lo que considero que el gobierno vasco, los grupos parlamentarios y el LABI nos deben una explicación a los ciudadan@s vascos. Lo mejor que se puede hacer en este momento es tomar por parte de la administración una serie de medidas que nos lleven a la normalidad.
1) Olvidarse de los test de pcr y centrarse en lo que siempre la medicina tendría que haberse centrado y es el intentar sanar a los pacientes y no crear enfermos imaginarios con unos test y una premisa totalmente alejada de lo que debe ser la medicina como son los asintomáticos no considerándoles enfermos ni contagiadores.
2) Empezar a olvidarse de querer vacunar por vacunar con un medicamento que no tiene sufciente tiempo de estudio y que ya nos está dando problemas secundarios y posibles problemas a futuro, y, para ello hay que abandonar esa cerrazón de querer vacunar a los jóvenes cuando más del 95% de los positivos en esa franja de edad son asintomáticos, es decir, no enfermos, además de ser una franja de edad sin letalidad y que difícilmente pueden contagiar a los vacunados, ya que si consideran que se pueden contagiar, ¿que sentido tiene el haber vacunado con un medicamento con total falta de investigación?
3) Empezar a difundir un discurso totalmente contrario al del miedo que es el que se ha llevado durante toda la pandemia, empezando por decirnos, que los vascos no tenemos que ser genéticamente diferentes a otros europeos, de forma que la población vea con claridad como en los acontecimientos deportivos últimos, tenis, fútbol, ciclismo, las personas han estado tanto sin distanciamiento social como sin mascarilla. Ya va siendo hora de que la población vasca vuelva a recuperar su estado normal neuronal y no este bloqueo mental que ha logrado el miedo implantado por las administraciones, políticos, medios de comunicación y sanitarios.
Gracias de nuevo Jon Ander por tú valiosa y valiente información . Me pregunto cuando dejará el personal de prestarse a participar del circo de los test…. mientras siga tanto colaboracionismo..nos van a seguir teniendo en sus manos para seguir jugando al gato y al ratón.Del infecto fármaco que están inoculando ni hablamos ya…y de pretender someter a la juventud…es como para echar a correr y no parar…no doy a basto ya con tanta sumisión y con tan poca solidez intelectual. De G.V. y sus alikates están haciendo buenos tiempos anteriores . En la confianza de que Vascos y Vascas… pués..despierten.. seguiremos caminando. Gracias Valiente.
Pues sí, gracias a Jon Ander sabemos que los políticos nos estań engañando, y gracias a otros como él sabemos que el informe Drosten-Corman está más que refutado pero por supuesto no se reconoce…, ni el gran público lo sabe siquiera o sabe lo que implica, ya a estas alturas del partido uno tiene que asumir que la gente es tonta o tan manipulable que es como si lo fuera, y que los gobiernos son traidores a sus países a los que habría que fusilar o están tan de rodillas al mundialismo que es como si lo fueran. Un poco de todo creo yo. Creo que vamos a ver este invierno una verdadera despoblación planetaria a no ser que como tantas veces pasa, la biología humana sea más terca en sobrevivir de lo que han calculado los adoradores de satanás que realmente gobiernan.