Jon Ander Etxebarria, Pako Iriarte y Joseba Argintxona presentarán una “nueva propuesta política”: Este domingo, en Erandio
Organizado por el colectivo ‘Piztu Erandio Taldea’, los disidentes vascos Jon Ander Etxebarria, Pako Iriarte y Joseba Argintxona ofrecerán una conferencia que se promociona bajo el siguiente titular: “El relato de la pandemia, nueva propuesta política y perspectivas personales de disidentes”.
Será en Erandio, el próximo domingo. Comenzará a las doce y media del mediodía: ¡No os la perdáis!
Igande honetan, Erandion, 12:30etan, hitzaldi oso-oso interesgarria: “Pandemiaren kontakitzuna, proposamen politiko berria eta hiritar disidenteen perspektiba pertsonalak”. Jon Ander Etxebarria, Pako Iriarte eta Joseba Argintxona izango dira hizlariak.
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Antolatzaile: Piztu Erandio Talea.
Hace ahora un año, Bizitza logró una movilización sin precedentes y teniendo todo en contra, en las calles de Bilbo. Esa multitudinaria concentración hizo que la canallesca se echase para atrás. Aturdidos por el fervor de la sabiduría popular, hicieron cuentas y llegaron a la conclusión de que iban a perder 100.000 votos, los allí presentes, y ellos viven con todo tipo de lujos y torturando al pueblo, con el voto que les otorgamos para que puedan acceder a su poltrona y desde ahí menospreciarnos y machacarnos durante unos cuatro años, casi nada. La de Bilbo tuvo sus precedentes en Gasteiz y Donostia (en dos ocasiones) con unos resultados que desbordaron cualquier previsión. Me he quedado pensativo sobre el porqué ello no tuvo su continuación. Digo pensativo, no soy quién para exigir explicaciones a un colectivo que ha logrado dar voz y presencia a la resistencia de este país, faltaría más. Una voz y una presencia silenciadas por todos los medios “oficiales” de desinformación y embrutecimiento de masas pero muy tenida en cuenta por sus respectivos analistas e inmediatamente transmitidas a las “altas” esferas de quiénes se autodenominan políticos en este país, me refiero al país de los vascos.
Otra cuestión en la que quiero, esta vez sí, intervenir, es que no os considero como disidencia vasca, sino como conductores de un primer embrión de la resistencia de un pueblo que se niega a ser exterminado. Esos cien mil participantes aquel 12 de enero, éramos en realidad, ni la cuarta parte de los que no pudieron, por el motivo que sea efectuar el desplazamiento. En mi caso, fuimos cinco y dejamos en tierra a veinte resistentes, contando solo una calle (entera) de la localidad. Es decir un 25% de una sola calle compuesta por decenas de ellas y en un país con unas cuantas “localidades”. Sólo espero que este imprevisible y aún no calculado cupo de masa crítica, no se pierda en las entrañas de un Estado putrefacto y extranjero (C.A.V incluida) y tenga la suficiente osadía e inteligencia política para apostar por el Estado paralelo y propio.
Konformatu ez zirelako gara eta konformatuko ez garelako izango dira.