La asociación animalista ATEA se opone a la construcción de un «laberinto vegetal» en Vitoria-Gasteiz
A continuación compartimos el último comunicado de la asociación ATEA:
Nos oponemos con firmeza a la construcción de un «laberinto vegetal» en una de las campas de Olarizu (Vitoria-Gasteiz)
El Ayuntamiento de Gasteiz ha anunciado la construcción de un gran «laberinto vegetal» en una de las extensas campas cercana al edificio de La Dehesa, en Olárizu. Los motivos que aduce para dicho proyecto son varios, y todos, sin excepción, nos parecen cuando menos poco defendibles.
Asegura el Ayuntamiento que la nueva masa vegetal posibilitará a las aves anidar y reproducirse, favoreciendo así la vida a nuestra avifauna local. Y en ATEA nos preguntamos: ¿es que no tienen ya los pájaros de la zona ―y los del municipio en general― suficiente arbolado para sus proyectos vitales? Consideramos absurdo pensar que con el extraordinario entorno de árboles y setos a su entera disposición en esa zona concreta, un mirlo o un petirrojo vaya a elegir precisamente el lugar en que se concentra un buen número de personas atraídas por el laberinto (para suscitar el interés de la gente y como polo de atracción se hace), donde siempre habrá niños vociferando, padres tratando de recuperarlos, y en general una actividad humana frenética si la comparamos con cualquier otro espacio a apenas unos cientos de metros. Además, en el caso de que a algún ave despistada se le ocurra construir su casa en los setos del laberinto, parece lógico pensar que se arrepentirá más pronto que tarde, por las elementales razones aludidas. Sabido es que las aves buscan tranquilidad, y no un constante jolgorio de voces y actividad humana.
Asegura el Ayuntamiento que el laberinto ayudará a aumentar la diversidad biológica del parque. Y ATEA expresa serias dudas al respecto, pues no llegamos a comprender por qué extraño motivo el laberinto va a atraer a especies animales y vegetales que antes no se conocían en el entorno.
Asegura el Ayuntamiento que el laberinto favorecerá en general a la fauna de ese nicho ecológico, y ATEA tampoco entiende por qué. Pues, para empezar, las obligadas obras para levantar dicha infraestructura deberán horadar el terreno, donde vive una cantidad ingente de animalillos, además de causar durante meses un insoportable ruido para la fauna tanto aérea como subterránea. Por tanto, empezamos con una masacre de seres que hasta entonces vivían ahí plácidamente, para, en el mejor de los casos, ofrecerles un nicho ecológico que ya tenían sin la arrasadora intervención de la administración municipal.
¿Quién ha pedido la construcción de un laberinto vegetal en semejante lugar? Que sepamos, nadie. El sitio es frecuentado a diario por numerosas personas de todo tipo y condición, y la extensa campa ofrece un lugar de esparcimiento más que satisfactorio para familias enteras.
Otro detalle que acaso la ciudadanía no conozca, pero nosotros sí, es que durante las largas y numerosas reuniones mantenidas en su momento entre Ayuntamiento y entidades animalistas se confeccionó un mapa con los espacios para el libre esparcimiento de perros, como así se recoge en el Decreto de Alcaldía de 9 de octubre de 2017. Dicho mapa fue consensuado con el Consistorio tras ímprobo esfuerzo, y la extensa campa objeto ahora de polémica quedó como «espacio libre para los canes». Algo tuvimos que ver con tal logro las asociaciones proteccionistas. Y ahora, sin siquiera recabar la opinión de quienes de forma altruista formamos parte durante meses de aquella [enriquecedora] experiencia, se decide llevar adelante de forma unilateral el proyecto que nos ocupa. No sabríamos aportar aquí una definición inequívoca de democracia local, pero desde luego tenemos claro que nada tiene que ver con este tipo de comportamientos municipales.
¿Ha ofrecido el Ayuntamiento alguna alternativa para el esparcimiento canino tras la ocupación del laberinto en el barrio? No nos consta. Recordamos aquí que en el resto de espacios verdes del entorno de la campa no está permitido la suelta de perros, y que por tanto las numerosas familias que diariamente acuden a la campa para pasear a sus perros se verán seriamente perjudicadas por esta decisión.
Por todo lo aquí expuesto ―y otras cuestiones quizá de segundo orden, pero que aportan peso a nuestra reivindicación―, entendemos que la idea del laberinto debe ser abandonada, pues el entorno es ya suficientemente atractivo para humanos y animales como para trastocar el escenario sin necesidad objetiva.
ATEA
[Asociación para un Trato Ético con los Animales]
Estos animalistas perreristas no dicen mas que tontadas.
Fuera perros de los pisos de las ciudades.
Fuera perros de los sitios públicos.
Los jardines y verdes arreglados, para los humanos
LA paranoia DE ÈSTA GENTE NO TIENE LÍMITES…NO SÈ PORQUÈ SE LES DA ÈSTE PROTAGONISMO (QUE, ES PRECISAMENTE LO QUE BUSCAN, PARA SENTIRSE IMPORTANTES Y BENEFACTORES DE LA SOCIEDAD)…ME RECUERDAN A ESOS OTR@S GRUPOS DE feminist@s/masculinistas/machismo/hembrismo…NO PIENSO LEER NI UN SOLO ARTÍCULO MÁS , DE ÈSTA GENTE…CON LA QUE LE ESTÁ CAYENDO AL SER HUMANO… Y PREOCUPÁNDOSE DEL BIENESTAR DE LOS INSECTOS Y GUSANOS … ES INCREĮBLE EL TRASTORNO MENTAL DE ALGUNOS !!