Las autoridades informaron el lunes 27 de septiembre de la muerte de un niño de Texas tras contraer una rara ameba comedora de cerebros detectada en un parque acuático de Texas al que el niño había acudido, y de que una investigación había revelado lagunas en las pruebas de calidad del agua en varios parques, según adelanta Dan Barlowe en BLes.

Según los funcionarios de salud pública del condado de Tarrant, el 5 de septiembre un niño había sido hospitalizado con meningoencefalitis amebiana primaria, una infección rara y a menudo mortal causada por la ameba naegleria fowleri, que suele ser mortal para quienes la contraen. El niño fue declarado muerto en el hospital el 11 de septiembre, informó ABC News.

Tras la muerte del niño, las autoridades iniciaron una investigación y cerraron todas las piscinas públicas de la ciudad. El viernes, las autoridades municipales anunciaron que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) habían verificado la presencia de la ameba en muestras de agua tomadas en el chapoteadero del parque Don Misenhimer.

Una revisión “identificó lagunas en nuestro programa de inspección diaria”, dijo el subgerente municipal Lemuel Randolph. “Esas lagunas hicieron que no cumpliéramos con nuestras normas de mantenimiento en nuestros chapoteaderos”.

Los empleados no informaron ni llevaron a cabo las pruebas diarias de calidad del agua requeridas en dos de los cuatro parques acuáticos de Don Misenhimer y el Centro Recreativo de Beacon, según los registros obtenidos por la filial local de televisión KTLA5.

Las lecturas de cloración del agua no fueron reportadas en dos de las tres fechas en que el niño estuvo allí a finales de agosto y principios de septiembre, dijeron las autoridades de la ciudad que revisaron los registros de inspección en el chapoteadero Don Misenhimer.

Los CDC dicen que las infecciones por Naegleria fowleri son raras, con solo 34 casos documentados en los Estados Unidos desde 2010 hasta 2019. Las personas se infectan cuando el agua que contiene la ameba entra en el cuerpo a través de la nariz, lo que sucede con mayor frecuencia cuando las personas nadan o bucean en lagos y ríos.

Los CDC declaran que el suministro de agua de la ciudad es seguro porque los preventores de reflujo aislaron el agua del chapoteadero del suministro de agua de la ciudad.