• Escrito por Jon Ander Etxebarria, ex Decano del Colegio de Biólogos de Euskadi
• Enlace a su blog: El Dato Mata el Relato

Sociedad vasca, creo que ha llegado el momento de despertar

El último despropósito ha venido de la mano de las mascarilla, ayer en el Congreso de Diputados se aprobó la eliminación de la mascarilla en interior, y, en dicha votación nuevamente el PNV votó en contra de que se eliminase, y EHBildu y Podemos se abstuvieron, es decir, decantándose nuevamente nuestros políticos vascos por el despropósito y la conculcación de derechos y libertades y, en este caso, con una gravedad aumentada, como es el que todavía sigan los menores con la obligación de la mascarilla en las escuelas e ikastolas.

La deriva que llevan nuestros representantes políticos con el fin de la pandemia y el asunto de la guerra Rusia-Ucrania, donde esta ningún político ha sido capaz de reconocer que con lo acontecido con Putin ha dejado toda esa supuesta ciencia del oficialismo fuera de juego, al estar pasando a otros países refugiados ucranianos sin estigmatizarlos por no tener pasaporte covid, o prueba de PCR o antígeno para cruzar la frontera, como así debería haber sido con todos los ciudadan@s del mundo, y no como se ha venido actuando durante toda esa pandemia por parte del supuesto mundo democrático, que lo que nos ha demostrado es que carecen del verdadero conocimiento del significado real de esa palabra.

Nuevamente, y no contentos con todo el despropósito que nos han ido demostrando a lo largo de la pandemia, nos dicen ahora, sin que se les caiga la cara de vergüenza, que las personas asintomáticas o con síntomas leves no tienen que guardar cuarentena e incluso tienen que ir a trabajar normalmente y entonces nos podríamos preguntar:

• ¿Cómo es que nos hayan estado diciendo y obligando durante toda la pandemia a confinarnos no solo con sintomatología leve, sino también a personas que no tenían sintomatología alguna?
• ¿Cómo es que nos hayan conculcado derechos y libertades con el argumento con total falta de ciencia, cuando no solo los enfermos leves sino los asintomáticos nos aseguraban que eran bombas de relojería contagiadoras?
• ¿Es que no nos calificaban de negacionistas a los que desde un inicio nos opusimos a esos criterios basados en una total ausencia de ciencia y en cambio, llenos de base política?
• ¿Es que los políticos, sanitarios, científicos, no tienen que pedir perdón a una sociedad a la que se han encargado de desestructurar y estigmatizar?

El último despropósito ha venido de la mano de las mascarilla, ayer en el Congreso de Diputados se aprobó la eliminación de la mascarilla en interior, y, en dicha votación nuevamente el PNV votó en contra de que se eliminase, y EHBildu y Podemos se abstuvieron, es decir, decantándose nuevamente nuestros políticos vascos por el despropósito y la conculcación de derechos y libertades y, en este caso, con una gravedad aumentada, como es el que todavía sigan los menores con la obligación de la mascarilla en las escuelas e ikastolas.

El voto del PNV es acorde con su postura dictatorial llevada a lo largo de toda la pandemia, donde la Sra. Gotzone Sagardui pide estudios para quitarla y, sin embargo, no ha realizado ni realizará ningún estudio para avalar su tesis de mantenerla no solo en interior sino también en exterior, asi como a algunos de los profesionales sanitarios y epidemiólogos que siguen queriéndola mantener a toda costa, eso sí, al igual que la Sra. Gotzone Sagardui sin estudio científico alguno.

El voto de Podemos y de EHBildu es un voto esperpéntico que encierra una total falta de conocimiento científico y de cooperar con políticas antidemocráticas y que en todo momento están vulnerando derechos y libertades a la población vasca.

Es ya tan reiterada la actuación esperpéntica de nuestro gobierno con su Lehendakari a la cabeza que ya no solo vale con pedir “kanpora”, sino que tendrá que ser la sociedad vasca quienes les pongan en su sitio y se consiga que estos sres. dejen de una vez la política porque lo que nos han demostrado de forma reiterada es que no sirven para hacer política para el pueblo y, en cambio lo que si hacen y muy bien es vivir de la política a costa de los ciudadan@s vascos, y, por otra parte, la oposición de los principales partidos vascos, en esta pandemia, es de total seguimiento de la política jeltzale de forma que aunque ellos crean que se lavan la cara con la abstención son igualmente culpables del atropello dictatorial que se está haciendo a la sociedad vasca.

Como el que calla otorga estos sres. al igual que los jeltzales se han colocado también en fuera de juego de la política comprando el discurso de la política de la casta como ellos la definían al vivir igualmente de ella, siendo por ello necesario que se vayan formando plataformas ciudadanas locales, bastares, auzolan, fuera de los partidos políticos tradicionales al uso, de forma que sea la propia sociedad vasca quien se empodere de su futuro.