Demoledora carta dirigida al alcalde de Vitoria-Gasteiz en relación a la lamentable actuación policial en un teatro por el Pasaporte COVID
A continuación compartimos la nota de prensa que nos ha enviado Marisa A. A., presidenta de la asociación EONCULT Vitoria, en relación al lamentable suceso ocurrido en un teatro gasteiztarra del que informamos ayer mismo (esta mañana hemos sacado una ampliación destacando el hecho de que la víctima ha denunciado a los agentes de la Policía Local y al alcalde de Vitoria-Gasteiz, Gorka Urtaran):
Buenos días Sr. Alcalde,
Esta carta no es sólo para usted sino para todos los partidos políticos del Ayuntamiento, la Diputación Foral de Álava y el Gobierno Vasco. Por supuesto, va con copia a la prensa que tiene total libertad para publicar este e-mail.
Hemos visto la última actuación policial contra una PERSONA INOCENTE a la que echaron de un teatro como si fuera un criminal, humillándole, vejándole y deshumanizándolo públicamente. Este acto es impropio de una sociedad civilizada además de DELICTIVO.
El pasaporte nazi (mal denominado covid) implica actitudes discriminatorias y de incitación al odio, además de vulnerar derechos constitucionales y tratados internacionales que tienen que ver con los DERECHOS HUMANOS.
¿Debemos entender que las personas no inoculadas perdemos los derechos humanos y tenemos que ser tratadas como apestadas por el mero hecho de no inocularnos inyecciones experimentales y negarnos a participar en el ensayo clínico mundial?
¿Quién o qué les da derecho a defecar sobre NUESTROS DERECHOS HUMANOS? ¿Qué será lo próximo?
¿VIOLAR MUJERES NO INOCULADAS? ¿AGREDIR A MENORES DE EDAD CON PALOS POR NO INOCULARSE? ¿GUILLOTINAR A PERSONAS POR SER GAYS O TENER UN COLOR DE PIEL DIFERENTE?¿PONERNOS UNA CORREA PARA QUE HAGA JUEGO CON EL BOZAL Y PUEDAN SACARNOS DE PASEO?¿O VOLVERÁN A QUEMARNOS EN LAS HOGUERAS A LAS FEMINISTAS?
ES SIEMPRE LA MISMA MIERDA… FOMENTAR EL ODIO AL DIFERENTE y ESCLAVIZAR A LAS CLASES TRABAJADORAS.
En estos momentos, ustedes NO PARECEN SERES HUMANOS, parecen CRIATURAS DEL AVERNO dirigidas por alguna SECTA SATÁNICA de una película de serie B.
¿CÓMO HEMOS LLEGADO A ESTO?
SI QUIEREN MATARNOS, ¡DÍGANLO! ¡NO SEAN COBARDES!
Afrontaremos lo que venga.
¿DE VERDAD CREEN QUE SALDRÁN BIEN LIBRADOS DESPUÉS DE EJECUTAR ESTOS ACTOS DE MALDAD EXTREMA?
Pues claro que no, quien busca el mal siempre acaba encontrando al diablo y el diablo siempre acaba traicionando a quien bien le sirve.
Marisa A. A., Presidenta EONCULT
Hay que ir asi, de cara y sin callarse.
Conozco no vacunados que “se camuflan”, y les digo a todos: es un error, dad la cara, luego no habra vuelta atras.
Adelante, cojones, adelante.
Eskerrikasko Marisa por tu valentía y entrega.
No dudes de que no saldrán bien parados y tampoco de que una mentira tan gorda es imposible sostenerla durante tanto tiempo enfrentada a la conciencia…por un algún lado tiene que reventar.
A no tardar tendrán que rendir cuentas ante la ley…..ante la Universal sin duda…ante la Natural ya lo estarán sufriendo con su conciencia…y ante la justicia humana…no lo sé porque, moralmente es tan mediocre que parece un juego a la lotería…a ver que juez me toca….pero también van despertando.
Ánimo y abrazos
Iulen
Aunque agradezco la carta, disiento en el trasfondo de la culpabilización de las minorías diferentes. Aunque sé que es una opinión tremendamente impopular hoy día, no creo que esté fundamentalmente mal criticar u oponerse a minorías que por su idiosincrasia generan fricción y desgaste o conflicto social, siempre y cuando haya una justificación válida en lógica y relevante, que no sería el caso de los “negacionistas”. Por ejemplo, la islamización no está bien, desde el momento en que exige un sobreesfuerzo y un desgaste general de las sociedades de valores cristianos (incluso si la mayoría es atea) que han sido creadas por y para gente con valores cristianos (aunque sean ateos, repito), y ésta en la práctica supone en buena parte la destrucción o disolución de esa sociedad; una sociedad que por la tolerancia al todo acoge todo tipo de identidades, diluye su identidad propia, y con ella su cohesión de valores necesaria para defenderse. Sin embargo, no hay justificación real para la oposición o crítica a los “negacionistas”, puesto que por más que pueda haber una fricción (imbuida desde arriba y no de base, hay que decirlo), no hay fundamentos lógicos para ello, y más bien, al contrario, los hay para oponerse y criticar a la mayoría no “negacionista”.