La Fiscalía investiga a la monja benedictina Teresa Forcades, licenciada en medicina y teología y doctora en salud pública, por un presunto delito contra la salud pública, según adelantan varios medios del establishment.

Las autoridades investigan si Forcades recetó sustancias supuestamente “ilegales a pacientes con enfermedades graves” y, al mismo tiempo, “si incitó a estos pacientes a abandonar los tratamientos médicos indicados para sus patologías”.

La investigación se ha iniciado a partir de una denuncia interpuesta a finales de enero por el Colegio de Médicos de Barcelona (CoMB), que supo que Forcades habría indicado presuntamente a pacientes realizar tratamientos con clorito de sodio, un compuesto para algunos, un medicamento aconsejado como alternativa terapéutica para otros.

A través de un comunicado, el CoMB explicó que decidió llevarlo a la Fiscalía a finales de enero, ya que los hechos “podían ser constitutivos de delito”. Detallan que la religiosa lo habría hecho “a lo largo de varios años” con pacientes “con enfermedades graves”.

El Colegio de Médicos de Barcelona asegura que “la indicación de estos productos se habría realizado en la asistencia a pacientes con enfermedades graves, a los que también se habría presuntamente incitado a apartarse de tratamientos validados para sus patologías”.

Por su parte, Forcades ha negado “categóricamente” haber recetado sustancias no autorizadas ni haber “infringido cualquier norma deontológica”, según unas declaraciones realizadas a EFE. Afirma que “desde el año 2018, el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona intenta de forma activa y constante coartar mi libertad de expresión sin ningún tipo de base ni de evidencia científica”, algo que no es una afirmación de Forcades, sino una constatación de los hechos acontecidos durante los últimos cuatro años.

Desde la redacción de #EuskalNews solo podemos hacer una cosa: mostrar todo nuestro apoyo a Teresa Forcades. Herris zurekin!