LA PRUEBA
Imagina que una raza hiperbórea nos sobrevuela y nos observa (Los que crean en la NASA pueden imaginar extraterrestres, tal como la NASA los pinta). Imagina que han visto todo lo que hemos hecho en estos casi tres años de “pandemonium”. ¿Crees que estarán por la labor de permitir nuestro ingreso en la Federación Galáctica?
-Bueno, pues si nos están viendo, ya podrían bajar y ayudar. Si tienen la tecnología necesaria para venir hasta aquí es porque han superado la misma prueba que nosotros estamos atravesando. Seguro que ellos también se han visto al borde de la extinción por culpa de tanta química-
¿Y qué quieres que hagan? ¿Qué nos rescaten? ¿Que nos saquen de esta jaula de grillos? ¿Que accedan a llevarnos con ellos, a pesar de nuestro gran defecto? ¿¡Para decirles luego aquello que le dijo el escorpión a la rana al cruzar el rio!? -¡Perdona pero es mi naturaleza!-
En las películas, los extraterrestres suelen ser “los malos”; los que van, por ahí, arrasando mundos, para apropiarse de sus minerales o para zamparse a sus habitantes. En realidad, si nos observan, verán que es justo al revés, que somos los terrícolas los que nos comportamos como depredadores insaciables. Si nos raptaran, así, con nuestro gran defecto incorporado, seguro que, al menor descuido, trataríamos de convertirlos en harina, como hacemos con los insectos. Igual son una especie gigante de saltamontes o mantis. Vete tú a saber. ¿No suelen retratarlos así en las películas?
Si de verdad hay un extraterrestre observando, significa que ha alcanzado un nivel mental superior al nuestro, que está más evolucionado pues ¿No estamos, los terrícolas, al borde de la extinción, sin haber tenido la posibilidad de visitar otros mundos? Si alguno de ellos ha podido llegar al nuestro es porque, seguro, ha superado ese gran defecto que es el ego, el egoísmo, la codicia; ese instinto bestial que aún nos nubla la mente, a los terrícolas, y nos compele a apropiarnos de lo que tienen los demás, a pretender que los demás nos sirvan. Si esos extraterrestres están viendo cómo nos tratamos entre nosotros ¿No pensarán que los trataríamos mucho peor a ellos? ¡Llevarnos en su nave sería como llevar al octavo pasajero!
Si los extraterrestres nos observan, tengo claro que se compadecen de nosotros (Pues la superación del ego abre la mente a la compasión, al amor) pero, aún compadeciéndose, no creo que puedan cargar con nosotros y con nuestro gran defecto. Si nos llevaran en su nave, seguro les atacaríamos por la espalda, como el alacrán a la rana, y aún intentaríamos justificarnos diciendo -Es nuestra naturaleza- Pero ni siquiera sería ese el motivo más importante (Pues si tienen la tecnología necesaria para venir hasta aquí, también tienen la tecnología necesaria para protegerse de nuestros ataques). Les resultaría imposible intervenir porque, para ingresar en la Unión Galáctica, es normal que se requiera un nivel mental mínimo, que se le exija, al candidato, haber evolucionado lo suficiente para comprender que el ego no es nada natural.
José Miguel Ruiz Valls
Lo de los extraterrestres viene de lejos. La antiquísima literatura sagrada sánskrita recoje jerarquías de ellos, y de los “creadores” o padres de la Humanidad terrestre. Estos son los Pitris, o Pitaras, o Padres.Solo hay que teclear en el buscador, Pitris, y sale mucha información y desinformación tambien. Desinformación que repite errores intencionados o no, sobre este fenómeno y su papel en la “creación” de la Humanidad de la Tierra.
Si alguien se interesa, y le gustan las sorpresas, que lea sobre ello, pero cuidado, porque de una lectura interesada o ignorante, de gente a la que le llegaron campanadas, y vió negocio en ello, viene toda esa basura de los extraterrestres explotadores y malvados que han esclavizado a la Humanidad, y según esa absurda y burda “exégesis”, siguen haciéndolo hoy.
También, los textos teosóficos, los primeros que trajeron a Occidente lo que se conoce como reencarnación, que hoy es aceptada, o no, pero con normalidad ya cotidiana, son los únicos que aportan información no sesgada que recoje fielmente los textos originales. Ni de los sanskritistas puede uno fiarse ya que no pocos de ellos eran clérigos ya católicos ya protestantes, de cuyas versiones ya puede imaginarse sin dificultad la fiabilidad que merecen.
Nunca había oído hablar de “pitris”. Lo teclearé. Alguien que escribe tan pulcramente no puede dar malas recomendaciones. Un saludo.
Gracias por su amable comentario.
Esta Humanidad es, de la llamemos, estirpe de los Pitris. No es de la Estirpe de una Humanidad de un mundo de alguna de las estrellas de las Pléyades, que también son humanos. Hablo de estirpe como podría afirmar y sería cierto, que usted pertenece e una estirpe y yo a otra, y ambos pertenecemos a esta Humanidad. Pero los Pitris, son seres que empezaron su evolución edades sin cuento antes que nosotros. Si su interes le lleva a enfrentarse a cosas tales como Cadenas Planetarias, Rondas, y Globos (planetas), lo comprenderá, porque este es un punto sobre el que existe una gran confusión en la información, al menos en las Redes de Internet.
Los Pitris no nos “crean” porque toda vida en el Universo es increada. Cada “unidad individual” de Vida se llama Mónada. San Pablo asigna a la Mónada el nombre de Espiritu de los tres en que divide al Hombre. Las otras dos son Cuerpo y Alma. Si la Mónada es increada, los Ptris solo “crean” el cuerpo físico (de San Pablo), y los rudimentos del Alma o psiquismo (de San Pablo), de los que la increda Mónada se apropiará y con los que iniciará su andadura evolutiva a través de otros Globos, Rondas y Cadenas Planetarias, hasta que llegue al punto en el que pueda devolver el favor que se le hizo, y a su vez, ayudar a otras Mónadas a iniciar su aventura.
Este es telegraficamente el proceso vital universal que las escrituras Hindas relatan y que la Teosofía trajo a Occidente. Es un Mundo apasionante.
Espero disculpe mi atrevimiento.
Gracias y un saludo.
En todo mito hay algo de verdad y mucha fantasía, y eso tiene mucho que ver con el hecho de que, los narradores, suelen “mejorar” las historias que narran. ¿Se pueden extraer enseñanzas útiles de los mitos? Sin duda, si eres prudente. En mi caso, la prudencia me inclina a “no creer”. Ese es mi “límite”. ¿Quién sabe lo que hay en las Pleyades y cómo lo ha averiguado?
Como ha tenido paciencia de soportarme le responderé.
Hablé de las Pleyades como podía haberlo hecho de la estrella Betelgeuse de la constelación de Orión. Nada más. Tampoco tengo nada que decir sobre lo que está dispuesto a creer o no sobre los Mitos en general.
Solo quise decir que la existencia de extraterrestres y sus relaciones con el planeta Tierra vienen de muy antiguo. Mientras los bárbaros del otro lado del mundo tenían relatos más que mitológico desde hace milenios, en los que refieren la Cosmogénesis, Antrpogénesis, y los remotos ancestros de la Humanidad terrestre, refiriendonos solo y exclusivamente al asunto “Extraterrestre”, el Occidente cristiano y civilizado, despacha la cuestión con unas pocas palabras de los primeros capítulos del Génasis, y además, quemaba vivos como herejes a Los Giordano Bruno por escribir cosas como “El infinito Universo y los mundos”. Eso era antes de que los servicios de propaganda de algunas Iglesias Cristianas inventaran y difundieran las historias fantásticas de Reptilianos, anunakis, y toda esa basura con el sucio propósito de: “Si no puedes controlarlos, confúndelos”
Nada más,
Saludos.
Hace unos cuantos años, confundido, decidí dejar de creer (Dejar de tener por cierto lo que no he comprobado si es cierto). Hay quién lo llama “El camino del héroe”. Hoy puedo decir que lo tengo todo mucho más claro, que la verdad es muy simple, y a ella se llega restando, no sumando. Sobre eso escribo. Eso es lo que comparto con mis semejantes, por si le sirve a alguien. Un placer conversar contigo.
Estimado Sr. Ruiz Valls.
Agradezco el trabajo realizado por usted. Creo que está escribiendo de buena fe. Y deseo contestarle con todo el respeto debido.
Dicho esto, no podría estar más en desacuerdo; tanto con las ideas que expone como con la conclusión a la quiere llevarnos.
Lo de los extraterrestres bondadosos observando a la malvada humanidad es un motivo muy “New Age”. Aunque con profundas raíces culturales: antes eran los dioses que bajaban a la tierra y se retiraban asustados de la maldad y los vicios humanos; o el “homo homini lupus” de Hobbes.
Se trata de hacernos culpables de nuestros sufrimientos, y por tanto merecedores de castigos. Y por tanto convencernos de que nos conviene que alguien nos conduzca con mano firme por “nuestro propio bien”, o como gustan de decir los actuales tiranos por “el bien común”. Nos ponen bozal por nuestro bien, como penitencia por nuestra “irresponsabilidad”. Nos vigilan, nos controlan, nos debilitan, nos envenenan, nos enloquecen, nos esclavizan y nos exterminan por nuestro bien. Porque somos malos y tontos y no sabemos cuidar de nosotros mismos. El bien común.
Visto lo visto, si existen extraterrestres me parece más probable que sean como los famosos “reptilianos”. Seres que nos ven como ganado y quieren aprovecharse de nosotros. Con la complicidad de nuestros gobernantes. O sea, lo que la humanidad siempre ha conocido como ‘demonios’.
Estoy por escribir una apología del ‘ego’. En una era de colectivización brutal, de pensamiento único, de mente colmena, de negación de derechos y libertades individuales, de “bien común” decidido por demenciales tiranos… es necesaria una defensa del ser humano individual, de su libertad y de su dignidad inalienable.
Desede el origen de los tiempos se han utilizado los derechos individuales para eliminar los colectivos y viceversa .
Todos son derechos irrenunciables aunque les joda a los satrapas que nos “gobiernan” y siempre han intentado que no podamos ejercerlos
¿Crees que defender al ego es defender al individuo? El ego no es individual sino colectivo ¿O no actúa la codicia en todos los seres humanos? Otra cosa es que sepas ver eso. Cuando lo ves, puedes desactivarlo (Eso es “matar al ego”). ¿Quieres responsabilizar a otros por tu sufrimiento? Entonces les entregarás también tu felicidad. Nunca serás feliz mientras esos otros no quieran que lo seas ¿Y cuándo querrán? He publicado dos libros y unos ciento cincuenta artículos que hablan del ego (En “El Diestro” te saldrán todos ordenados, pulsando sobre mi nombre, en el encabezamiento de cualquiera de ellos. Sirva también para agradecer tu comentario en el que tampoco veo mala fe. Un abrazo.
No estás de acuerdo con la conclusión a la que quiere llevarnos el autor, la cual es: actuar con amor y no con egoísmo.
En mi experiencia, el considerar útil al ego me llevó a sentirme utilizada.
Y en la experiencia de poner atención a este autor, me llevó a recordar lo que se siente al amar. Si a ti no te ha recordado todavía, te recomiendo seguir atendiendo.
¡Gracias, Betsy!
Es un placer decir lo que realmente se siente, ojalá tus lectores sinceros aprovechen la oportunidad de observarse, y la oportunidad de disfrutar de tu amistad.